ALTERACIONES DEL FLUJO SANGUÍNEO CEREBRAL SE RELACIONARIA CON UNA MENOR VELOCIDAD DE MARCHA Y A CAIDAS.
Un nuevo estudio ha vinculado una deficiente regulación del flujo sanguíneo cerebral con una reducción en la velocidad de marcha y el riesgo de caídas en los ancianos sin demencias.
El estudio encontró que en comparación con los pacientes con más alta tasa de reactividad vascular cerebral (VR) al dióxido de carbono (CO 2), medida por eco doppler transcraneal, entre los que tienen la tasa más baja había un 70% mayor tasa de caídas.
"Nuestro estudio proporciona nueva evidencia de que la vasorreactividad cerebral alterada, como una de las medidas de la función endotelial, es asociada con marcha a baja velocidad y el desarrollo de las caídas en adultos mayores sin demencia", concluyeron los autores del estudio.
Hay una gran cantidad de datos que muestran que las anormalidades cerebrales de la sustancia blanca (WMSA) resultan de una deficiente regulación del flujo sanguíneo, pero la relación entre este deterioro y trastorno de la marcha nunca ha sido estudiado, dijo el principal autor del estudio, Farzaneh Sorond A., MD, PhD, profesor asistente de neurología en la Escuela Médica de Harvard y neurólogo asociado del Hospital Brigham and Women's de Boston, Massachusetts.
La Alteración del flujo sanguíneo cerebral podría ser el primer paso en un proceso que conduzca a cambios estructurales en el cerebro, que luego causa trastornos de la marcha y caídas, especuló el Dr. Sorond. Si ese es el caso, entonces las intervenciones con estatinas o la conversión de la angiotensina-inhibidores de la enzima (IECA), que mejoran la función endotelial pueden ayudar a prevenir ese resultado final, dijo.
Sin embargo existe la opción inversa que la reactividad vascular reducida, así como alteraciones de la marcha puedan ser los resultados de la inactividad física o desentrenamiento.
Mientras tanto se desprende de las investigaciones anteriores que la inactividad física es un importante factor de riesgo de caídas en los ancianos. "Los médicos pueden reducir significativamente este factor de riesgo en sus pacientes mayores con la prescripción de ejercicio físico, entrenamiento de la marcha y de terapia física, todas indicadas en forma personalizada para cada individuo. "
Tomado condensado y modificado de Medscape (R). Para ver articulo completo original ver aquí.
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